domingo, 12 de mayo de 2013

NOCHES EN BLANCO


Estos días todos los que conocimos a Pablo Cantos andamos sobrecogidos y abatidos ante tanta tragedia, hablando unos con otros para reconfortarnos y darnos fuerzas, sin ganas para nada, pasando los días como autómatas, con el pensamiento puesto en él. Así que anoche nos impusimos salir, buscar un rato de sosiego en las calles de Málaga, en esa Noche en Blanco que llena la ciudad de actividades culturales.

 De nuevo Selim Varol en el CAC Málaga (para que lo viese Pedro), los dibujos de Javier Roz en el Ateneo, las canciones de Efecto Mariposa en el concierto de la plaza de la Constitución, y las idas y venidas a la Galería de Arte Benedito para ver a José Carlos Robles de la Cruz pintar en vivo y en un directo una de sus marinas.


Self-portrait. Némesis IV, dibujo de Javier Roz





José Carlos Robles de la Cruz 


 Viendo aquellas marinas, aquellas playas con las orillas bañadas por la espuma y el rebalaje, nos acordamos de cuando Pablo Cantos se llevó a nuestro hijo Enzo (debía tener 6 años) a la playa de la Malagueta para rodar unas escenas del documental PICASSO, SOMBRA VIVA. Enzo tenía que hacer de "actor" durante unos segundos. Un papel sencillito: un crío haciendo un hoyo en la arena. Pero Enzo no quería salir en ninguna película y tuvimos que engañarlo. Le dijimos que íbamos a buscar un tesoro. Pablo buscaba las primeras luces de la mañana, y Enzo preguntaba por qué había que madrugar tanto para rescatar un tesoro que llevaba allí oculto tantos años. Tampoco conseguía entender por qué tenía que escarbar con las manos y no con una pala. Recuerdos. Recuerdos unidos a las imágenes iniciales de un documental. Un Pablo rodando sobre otro Pablo, en una película por la que desfilan Gabriel Alberca, Pablo Aranda, Gabi Beneroso, Eugenio Chicano, José Antonio Garriga, Juan Gavilanes, Pepe Ponce, José Antonio Torres Tabanera, y Rodrigo Vivar. A Pablo Cantos le hubiese gustado proyectar ese documental en el Museo Picasso de Málaga, pero la desidia de las autoridades pertinentes dejaron aquel trabajo sin estrenar y en el olvido.

 Selim Varol, Robles de la Cruz, Javier Roz, el concierto de Efecto Mariposa...

 Acostarnos tarde, caer rendidos y no pensar, para no tener más noches en blanco.

4 comentarios:

  1. Ya van siendo unas cuantas noches sin Cantos, noches todas en blanco.

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    1. Y las que nos quedan. Será difícil espantar esta tristeza. Espero que con el paso del tiempo la presencia de su recuerdo no resulte tan dolorosa.
      Un abrazo.

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  2. Las pérdidas nunca son fáciles y las oquedades que dejan son difíciles de llenar.
    Pero bien mirado, de todas las experiencias de la vida sólo permanecen los recuerdos, y llega un momento vital en el que nos alimentamos de ellos más que de vivencias reales.
    Por eso, en estos casos, es más importante atesorar y recordar los momentos compartidos, esos que tuvisteis el privilegio de disfrutar y haceros conscientes de que fuisteis afortunad@s al poder vivirlos.

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    1. Pues sí, Lidia. Esas vivencias, ahora recuerdos, son tesoros. Pablo siempre andaba motivando, valorando, aconsejando, enseñando, echando una mano. A mí con mi pintura, a Pedro con sus novelas. Sabía lo que te gustaba, lo que te interesaba... y allí estaba para dártelo, compartiendo siempre su pasión por el cine y la literatura. Realmente fuimos afortunados al tener el privilegio de compartir tantos momentos con él, momentos que han quedado en nuestra memoria y a los que podremos volver, desde la serenidad que concede el paso del tiempo, cada vez que lo echemos de menos.
      Un abrazo.

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